La Fundación SM y la OCDE presentan Docentes en Iberoamérica. Análisis PISA y TALIS
Andreas Schleicher, director de Educación de la OCDE y Javier Palop, director de la Fundación SM, han sido los encargados de presentar ayer este informe en la Casa de América de Madrid.
Este análisis ha cruzado los resultados de los informes PISA y TALIS, por lo que combina la situación y perspectiva tanto de los profesores como de los alumnos de los países de la OCDE.
Una de sus principales conclusiones es la importancia de fomentar una carrera docente atractiva para el profesorado como incentivo y clave de mejora de la calidad y equidad educativas en Iberoamérica.
En un momento como el actual, en el que las exigencias sobre el profesorado se vuelven cada vez más complejas, se hace especialmente importante el desarrollo de investigaciones que den respuesta a los principales interrogantes que giran en torno a los docentes iberoamericanos.
Docentes en Iberoamérica. Análisis de PISA y TALIS, elaborado desde la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en colaboración con la Fundación SM, ofrece una visión sobre quiénes conforman el profesorado de los países Iberoamericanos, los desafíos educativos a los que se enfrentan en estos países y destaca los mecanismos innovadores de aprendizaje para superarlos.
El informe subraya las desigualdades existentes en los países latinoamericanos y la dificultad de que profesionales bien preparados se animen a incorporarse a la profesión docente. El elevado número de alumnos en cada aula, la escasa retribución económica en la gran mayoría de los países y la carga de trabajo de los profesores están entre las razones que desaniman a los docentes y que reducen la calidad de la educación. El informe apunta la necesidad de un cambio profundo para revertir esta situación y analiza cómo un buen modelo de evaluación de los docentes puede favorecer su desarrollo profesional y, junto con otras iniciativas sociales y educativas, mejorar el aprendizaje de los alumnos.
Para la Fundación SM, en palabras de su director general Javier Palop: "tenemos una fuerte preocupación por el bienestar de los profesores y maestros", y considera prioritario "reconocer el valor y la importancia de una profesión clave para la ciudadanía y para el desarrollo de los países".
Precisamente una de las principales conclusiones del informe apunta que los países con mejores resultados son los que destinan medidas para mejorar el desarrollo profesional de los docentes. En Singapur, Japón, Finlandia o Alemania, los profesores cuentan con incentivos y retos profesionales que les ayudan a experimentar y seguir aprendiendo a lo largo de su carrera. La OCDE considera una buena práctica la autoevaluación, observación y experimentación en el aula como vía de mejora continua de la motivación y desarrollo de los docentes.
Ello está además relacionado con cómo los alumnos valoran esta profesión. En España solo un 5,6 % de los alumnos de 15 años querrían ser profesores (este dato aumenta al 7 % en el caso de las niñas). Esta percepción es diametralmente opuesta en los países más exitosos en las pruebas PISA, el las que la profesión docente es de las más valoradas y se encuentra entre las aspiraciones de los adolescentes.
Además, según afirma Andreas Schleicher, la calidad de la enseñanza es una de las formas de garantizar la equidad y la igualdad de oportunidades: "En la mayoría de los países, el código postal del alumno o de la escuela sigue siendo uno de los mejores indicadores del éxito educativo. Estos datos muestran que se pueden rectificar las desigualdades con oportunidades si se asignan profesores con un elevado nivel de calidad, y no simplemente más profesores, a las escuelas con mayores dificultades. Las políticas en materia de profesorado tienen un papel fundamental que desempeñar a la hora de ofrecer un futuro a millones de personas que actualmente luchan por tener uno".
Por otro lado, según arroja este informe, en los países participantes den PISA 2006 y PISA 2015, un aumento de autonomía las escuelas en la contratación del profesorado mejoraría el rendimiento de los alumnos. En este sentido desde la OCDE, se sostiene que, los directores de centros educativos con más libertad para adaptar las responsabilidades, las condiciones laborales y los salarios del profesorado consiguen atraer mejor a los profesores con más talento a las aulas con mayores dificultades.
Asimismo, la mayoría de los países y economías compensan a las escuelas desfavorecidas con clases más pequeñas o unas menores tasas de profesor por alumno. Sin embargo, en más de estos países, los profesores de las escuelas más desfavorecidas están menos cualificados o cuentan con menos experiencia que los de los centros más favorecidos.
En definitiva, las políticas relacionadas con el profesorado en los sistemas educativos de alto rendimiento comparten tres características comunes: un periodo obligatorio y largo de formación práctica en el aula antes de comenzar la carrera; posibilidades de desarrollo profesional para el profesorado, como por ejemplo talleres organizados por el centro educativo; y mecanismos de evaluación de docentes, con una especial atención al desarrollo continuo del profesorado.
De derecha a izquierda: Andreas Schleicher, director de Educación de la OCDE; Mariano Jabonero, secretario general electo de la OEI y Javier Palop, director de la Fundación SM; en la presentación del informe "Docentes en Iberoamérica. Análisis de PISA y TALIS en Casa de América.