Mientras la gran mayoría de estudiantes son nativos digitales, es decir que nacieron en la era digital y desde muy pequeños han estado familiarizados con la tecnología, los docentes suelen pertenecer a la categoría de “inmigrantes digitales” que son las personas que han tenido que luchar más para acostumbrarse a la era digital.
Este proceso de adaptación requiere de competencias digitales que son definidas como un conjunto de habilidades, estrategias y conocimientos necesarios para hacer un uso crítico, seguro y responsable de las Tecnologías de la Sociedad de la Información con fines educativos, comunicativos, sociales, comerciales o de ocio.
A pesar de que las competencias digitales están ligadas a las habilidades de uso de computadoras y demás aparatos electrónicos para buscar, difundir, producir y comunicar información, no se queda únicamente en eso. Para determinar qué tipo de conocimientos debe tener el docente para el manejo adecuado de las Tecnologías de la Información existen referencias como El Marco Común de Competencia Digital Docente (MCCDD) un documento elaborado por el Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y Formación del Profesorado (INTEF) basado en Marco de Desarrollo y Comprensión de la Competencia Digital en Europa.
En este documento se plantean cinco áreas claves para la destreza digital que cualquier docente debería tener en cuenta:
- La información, alfabetización informacional y el tratamiento de datos: se refiere a la capacidad de buscar información o contenidos en la red y seleccionar el más adecuado para nuestra asignatura. También a la capacidad de hacer una evaluación crítica de la información y tener la competencia de almacenar y posteriormente compartir lo encontrado con los estudiantes.
- La comunicación y colaboración: es la capacidad de comunicar en entornos digitales, compartir información en línea e interactuar y participar con otros por medio de herramientas digitales o comunidades. como por ejemplo utilizar nuevas herramientas para dictar clase o comunicarnos con los estudiantes por medio de redes. Lo anterior bajo las normas de etiqueta adecuadas para evitar situaciones de ciberacoso o irrespeto.
- La creación de contenido digital: Creación y edición de nuevos contenidos como textos, imágenes y videos por medio de herramientas digitales o programación informática con fines educativos, así como entender las licencias de uso y respetar los derechos de autor de la información utilizada.
- La seguridad: contempla la protección de los dispositivos electrónicos utilizados por medio de contraseñas y antivirus. Igualmente, la protección de la información personal de todos los estudiantes y miembros de la comunidad educativa, así como la importancia de aspectos como la salud física y mental debido a la adicción a la tecnología. En este apartado también se plantea la compra inteligente de tecnología y la reducción del consumo energético.
- La resolución de problemas: capacidad de resolver problemas técnicos e identificar nuevas herramientas para darles un uso didáctico y creativo.
Este grupo de habilidades y conocimientos pueden ser adquiridos y perfeccionados con mucha disciplina y práctica. De igual forma, es importante tener en cuenta que el mundo digital está en constante transformación y es necesaria una actitud de aprendizaje y disposición ante los cambios sobre todo con el papel tan importante que tiene el educador en la sociedad.
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